Los pico segundos son una de las máximas novedades que se muestran en el mundo de la eliminación del tatuaje como una revolución positiva. No obstante, se está demostrado que estos no son realmente tan efectivos y que el láser de eliminación de tatuajes debería utilizar preferiblemente los nanosegundos.

A continuación, te contamos el porqué de este descubrimiento, cuál es la diferencia entre uno y otro y qué deberías tener en cuenta a la hora de borrar tatuajes.

¿Cómo funciona un láser?

En primer lugar, vamos a comenzar hablando del funcionamiento de un láser común. Después, iremos aplicando cada una de sus características a la eliminación de tatuajes para entender cómo se consiguen borrar los tatuajes y por qué es mejor aplicar los láseres que utilizan nano segundos.

Un láser es un dispositivo capaz de emitir un haz de luz muy potente, muy enérgico. Esto quiere decir que esa luz posee una gran cantidad de energía y se diferencia por ello de otros elementos luminosos. Por lo general, la luz, que es un conjunto de fotones, se emite por parte de los átomos sin control. Podríamos decir que esos fotones se mueven en diferentes direcciones. Sin embargo, un láser concentra todos esos fotones y los emite en una sola dirección (razón por la cual se suele ver siempre como un punto de pequeño tamaño). Así al ir todos en la misma dirección, se consigue una mayor energía.

Ahora que se conoce algo más sobre el funcionamiento, parece que las aplicaciones van a ir dirigidas a utilidades en las que se necesite gran cantidad de energía. Así, podemos imaginarnos varias aplicaciones en el mundo industrial para soldar, perforar o cortar metales. En el ámbito clínico, también es posible utilizarlo para cirugía, pues el láser es muy preciso a la hora de cortar tejidos. Por otra parte, la medicina estética también lo utiliza en la depilación definitiva o para la eliminación de tatuajes, tarea en la que nos centraremos de aquí en adelante. En resumen, un láser tiene numerosas aplicaciones en diferentes ámbitos y se adapta a cada área según la potencia que requiere cada una de ellas.

En nuestro canal de YouTube podéis ver un vídeo que ejemplifica lo que sucede cuando se aplica un láser sobre un tatuaje.

Cómo se elimina un tatuaje

Laser de eliminación de tatuajes: Los picosegundos vs nanosegundos

Todos los dispositivos láser funcionan con un tiempo de disparo, es decir, en un determinado tiempo se emite una energía. El cociente entre esta energía y una fracción de tiempo determinada se conoce como longitud de pulso láser. Parece lógico pensar que cuanto mayor es el pulso, mejor será la acción final (en este caso, sobre la eliminación de los pigmentos del tatuajes). Sin embargo, cuando mantenemos la misma energía y disminuimos hasta llegar a unidades de tiempo tan pequeñas como son los nanosegundos o los picosegundos, hay que tener en cuenta otros factores.

Un nanosegundo es la billonésima parte de un segundo, mientras que un picosegundo es todavía menor, siendo mil veces inferior a un nanosegundo. Estamos hablando, por tanto, de láseres muy enérgicos.

Sobre la eliminación del tatuaje, el funcionamiento es el siguiente. Los pulsos del láser inciden sobre el tatuaje y destruyen los pigmentos que lo conforman, haciendo que se formen partículas más pequeñas que el cuerpo puede eliminar de forma natural. Estas partículas más pequeñas son reconocidas como extrañas por parte de unas células en nuestro cuerpo (macrófagos) que se encargan de eliminar bacterias, virus y otros agentes no conocidos. Estos macrófagos recogen los restos del pigmento y los eliminan, ya que al tratarse de partículas de menor tamaño pueden digerirlas y se expulsan fácilmente.

Ahora bien, se había visto que la efectividad de los láseres que tenían pulsos de nanosegundos era más que suficiente para la eliminación de tatuajes. Por otro lado, tras un tiempo utilizando el láser en el mercado, no se han observado efectos secundarios sobre la piel o sobre otras células colindantes, por lo que la seguridad estaba probada.

Sin embargo, algunas empresas decidieron poner en el mercado otras máquinas para la eliminación de tatuajes que empleaban una medida de tiempo mil veces menor, del orden de los picosegundos. Un pulso de láser más corto utiliza menos energía, pero por contra el efecto destructivo sobre los pigmentos es mayor.

La tinta del tattoo puede eliminarse por lo general con máquinas de nanosegundos que, además de ser totalmente efectivas, han demostrado no tener efectos secundarios a largo plazo como es el caso de la hipo-pigmentación. Por la experiencia que tenemos de más de 15 años eliminando tatuajes no podemos afirmar que los equipos en nanosegundos sean mejores que los equipos basados en picosegundos ni al revés. A juzgar por los resultados conseguidos podemos decir que se obtienen resultados muy similares.

El mercado actual

En el mercado han aparecido muchas empresas que venden equipos de picosegundos a precios muy asequibles. No nos consta a fecha de hoy que haya equipos en picosegundos reales con un coste inferior a los 70.000 euros. Los equipos en picosegundos reales tienen un coste mucho más elevado ya que no es una tecnología tan extendida, así que el precio por sesión debería ser también más elevado para los que quieran recuperar la inversión.

Buena prueba de ello es que los equipos basados en picosegundos proporcionan también la posibilidad de ejecutar el disparo en nanosegundos. Es decir, si el picosegundo fuera lo mejor, los nuevos equipos picolaser no prestarían la opción de disparar en nanosegundos.

Es más, los profesionales, por regla general, acaban utilizando los nanosegundos en la mayoría de sus trabajos.

Como ves, podríamos llegar a la afirmación de que la Mejor Máquina de eliminación de tatuajes sigue siendo la basada en nanosegundos.

La mejor máquina de eliminación

De hecho, las máquinas con las que trabajamos en Laserlight son de la gama Ink Hunter, las más potentes del mercado y que se adaptan a las necesidades de cada cliente en función de los tatuajes que presente. Así, pueden utilizarse la Ink Hunter Easy+, Ink Hunter Master o el modelo Ink Hunter Master Pro, cada uno más potente que el anterior. La opción más potente emplea un pulso de 6 a 8 nanosegundos y la frecuencia de disparo es de 1 a 12 veces por segundo. Con esto, y utilizando longitudes de onda específicas para cada pigmento, se consiguen eliminar la mayoría de los tatuajes sin necesidad de recurrir a unos pulsos mil veces menores.

En definitiva, los picosegundos no son tan interesantes como se plantea inicialmente por parte de algunas empresas de máquinas para borrar tatuajes. Por lo tanto a nuestro modo de ver entendemos que nuestros equipos en nanosegundos son en relación calidad/precio/resultados los mejores equipos para borrar tatuajes.